GOBIERNO DE GUADALUPE VICTORIA
Presidencia (1824–1829)
El 2 de octubre de 1824,
Guadalupe Victoria fue declarado primer Presidente de los
Estados Unidos Mexicanos para el período
1825-1829. El 8 de octubre de 1824,
el Presidente y el Vicepresidente Nicolás
Bravo juraron la Constitución.El Congreso convocó
a las primeras elecciones
federales en agosto de 1824.
Cada legislatura estatal podría nombrar a dos candidatos, y los dos que
recibieran el mayor número de votos serían elegidos como presidente y
vicepresidente. Los resultados fueron anunciados el 1 de octubre de 1824 y
por mayoría de 17 estados, Guadalupe Victoria fue electo presidente de la
República.
Guadalupe Victoria asumió el cargo de
presidente interino del 10 de octubre de 1824 al 31 de marzo de 1825.
Su período constitucional en el cargo se inició el 1 de abril de 1825. La inauguración
fue solemne y austera como es requerido por el republicanismo; ese día,
Victoria afirmó: ¡La Independencia se afianzará con mi sangre y la
libertad se perderá con mi vida!
Como presidente de la nueva República,
Victoria fue el encargado de reconstruir la devastada economía, resultado de la
larga guerra de
Independencia y el embargo promovido por la Monarquía Española.
Para resolver la falta de suministros, resultado del embargo, creó lamarina mercante del país, con la que
abrió rutas comerciales con los puertos de los países americanos que habían
reconocido la independencia nacional y con los que se establecieron relaciones
diplomáticas. Sin embargo, su principal preocupación fue lograr el
reconocimiento de alguna potencia europea.
El gobierno de Victoria se vio
obstaculizado por graves problemas financieros. Sus gastos promedio eran de $18
millones de pesos anuales,
pero sólo recolectaba la mitad de esa cantidad en impuestos. Con el fin de
resolver esa situación, Victoria tuvo que buscar ayuda externa. El Reino
Unido conociendo la difícil situación del Presidente (sólo el
Ejército representaba $12 millones de pesos del presupuesto), le convenció para
aceptar dos préstamos, cada uno de más
de £3 millones de libras esterlinas.
Estos préstamos, negociados a través decasas
bancarias como Barclay y Goldschmidt, evitaron la quiebra del gobierno
y ayudaron a mantener la paz social, factores que permitieron a Victoria a
cumplir su mandato completo.
A pesar de esos problemas financieros,
la administración de Victoria tuvo aspectos muy positivos. Dos de sus logros
más positivos fueron la creación de la hacienda pública y
la abolición de la esclavitud,
que fue declarada el 16 de septiembre de 1825,
cuando celebró por primera vez el Grito de Dolores. Además, estableció
el Colegio
Militar, restauró la Ciudad de México, mejoró la educación,
concedió amnistía a los presos políticos, estableció planes para un canal en
el Istmo de Tehuantepec,
abrió nuevos puertos para la navegación, comenzó la construcción del Museo
Nacional, creó guarniciones en Yucatán para prevenir y contrarrestar
los intentos
de reconquista española desde Cuba y
desenmascaró una conspiración dirigida por el monje Joaquín Arenas para restablecer el
dominio español.
Victoria también facilitó las
actividades de la sociedad Lancasteriana,
la cual se dedicó a la educación. Creó la Marina Armada,
lo que permitió que su mayor logro: la completa independencia de México cuando
el general Miguel Barragán y
el capitán Pedro
Sainz de Baranda derrotaron el último bastión español en San Juan de Ulúa.
En la política, sus acciones fueron
conciliadoras, intentó aplicar una política que atrajera a todos, y formó su
gabinete con miembros destacados de las diferentes facciones. Sin embargo, los
viejos conflictos existentes desde los tiempos de Iturbide resurgieron. Victoria
enfrentó la intolerancia religiosa ante la libertad de expresión y prensa establecidas
en la Constitución, la cual respetó escrupulosamente.
El 20 de diciembre de 1827,
decretó la expulsión de los españoles de la República. La rebelión
reprimida de Joaquín Arenas desató una ola de indignación contra los españoles
acaudalados que la habían apoyado. Aunque Lucas Alamán, su Ministro
del Interior, trató de disuadirlo, el embajador
estadounidense Joel R. Poinsett alentó
a Victoria para ordenar la expulsión de los españoles, lo que provocó
graves problemas económicos, debido a que la mayoría de los expulsados fueron
comerciantes que se llevaron sus fortunas a España.
No hay comentarios:
Publicar un comentario